CÓMO SABER SI MI PEZ ESTÁ ESTRESADO: POSIBLES CAUSAS
Existen ciertas señales que nos indican que un pez está estresado y detectarlos con prontitud puede ayudarte a prevenir enfermedades e incluso la muerte en algunos casos. Es por eso que debes asegurarte de proporcionar el mejor entorno posible para nuestros peces tropicales y abordar cuanto antes cualquier problema que surja.
Síntomas de estrés en peces
Hay algunos signos a tener en cuenta que son buenos indicadores de que tus peces están estresados:
- Pérdida de color: este tipo de estrés generalmente se debe a un cambio en el medio ambiente que incluye variaciones en la temperatura del agua, la introducción de nuevos peces, un cambio en el pH o sufrir variaciones en la calidad del agua.
- Cambios bruscos en el comportamiento: esto puede incluir patrones anormales de natación en nuestros peces, esconderse o sentirse expuesto, volverse más o menos agresivo, irse al fondo del acuario o flotar en la parte superior.
- Enfermedad: los signos de mala salud pueden incluir: ojos saltones, aletas podridas, estómago hinchado, manchas blancas y llagas.
- Pérdida de apetito: un pez estresado o enfermo tendrá poco apetito.
- Jadeo en la superficie: esta es una señal de estrés muy común, normalmente debido a las malas condiciones del agua y a la falta movimiento o corrientes de agua, por lo que el acuario no recibe la suficiente oxigenación.
Principales causas del estrés en los peces
Condiciones del agua
Las condiciones del agua pueden causar mucho estrés en los peces tropicales si no lo controlas adecuadamente. Si ves a su pez jadeando en la superficie, debes realizar una prueba de agua de inmediato para determinar si hay algún problema.
Los niveles altos de amoníaco o nitrato, los niveles bajos de oxígeno, la temperatura inadecuada (por ejemplo, los Goldfish prefieren temperaturas más frías que la mayoría de los peces tropicales), o incluso un pH alto o bajo pueden causar estrés (hay peces que prefieren agua ácida, otros prefieren agua alcalina y los hay que necesitan agua con un pH neutro), pero también debes controlar los niveles de sal si tienes un tanque de agua salada.
Compatibilidad con otros peces
Al igual que los humanos, no todos los peces se llevan bien, y a menudo se sienten apretados si viven con muchos peces o con la especie equivocada. Asegúrate de no poner demasiados peces en tu acuario, ya que esto conlleva a problemas de espacio y de calidad del agua.
Además, los peces necesitan múltiples escondites para evitar a los agresores. Cuando alimentes a tus peces, intenta distribuir los alimentos de manera uniforme, para que los peces no tengan que competir. Proporciona comida por todo el tanque y no olvides que hay peces que se alimentan en la superficie y otros que lo hacen en el fondo, tenlo en cuenta para darles a todos el tipo de comida adecuada.
Tamaño del acuario
La cantidad de espacio físico que necesita un pez en particular depende de su especie. Algunos peces funcionan bien en un acuario de 40 litros, otros precisan 300 litros o más. Mantener tu pez en un lugar que sea demasiado pequeño aumentará el nivel de estrés en ese pez y en todos los demás, consiguiendo una mayor agresión entre sus habitantes.
Ten en cuenta también que la cantidad de superficie requerida puede cambiar si los peces se emparejan para reproducirse. Los Cíclidos reproductores, por ejemplo, reclaman una parte del acuario para sí mismos en época reproductiva, ahuyentando cualquier pez que invada su territorio. Por lo tanto, la aparición de comportamientos reproductivos con frecuencia aumentará los niveles de estrés.
Alimentación
La mala nutrición también causa estrés. Una dieta saludable es una dieta variada, y debes evitar el uso de alimentos caducados en los que las vitaminas y otros nutrientes se han descompuesto. Cuando decimos comida caducada, incluye la comida que ha sido almacenada en lugares calientes, expuesta al aire (no sellada), etc, porque aunque su fecha de caducidad aún no haya pasado, sus compuestos vitamínicos de calidad han desaparecido.
Medicación
La acción de agregar medicamentos a tu acuario para curar una enfermedad determinada, a menudo produce efectos que son peores que la patología original. Los medicamentos que matan bacterias, parásitos, etc. generalmente no lo hacen de manera precisa y también pueden matar las bacterias nitrificantes y en ese momento es cuando realmente tienes un problema importante por que el agua podría ser toxica para los peces. Por ejemplo, algunas especies de peces no toleran ciertos tipos de medicamentos. Agregar tales medicamentos puede debilitar a los peces sanos hasta el punto de que se vuelven susceptibles a la enfermedad original.
Decoración del acuario
Proporciona escondites a tus peces para que se sientan seguros, como por ejemplo, la decoración con raíz de manglar de Marina, pero ten cuidado de no abarrotar tu tanque de adornos y decoración, ya que puede interferir con el flujo de oxígeno que es vital para los animales.
Iluminación
Como todos los animales, los peces necesitan un período de descanso y debe ser el mismo período todos los días. En la naturaleza el ciclo día y noche es bastante consistente, especialmente en los trópicos. Dejar la luz encendida todo el tiempo estresa a los peces y también contribuye al desagradable crecimiento de las algas. Poner la luz de tu tanque con un temporizador es una manera fácil de proporcionar un ciclo de luz constante diario.
Sobrepoblación
Cuando eres nuevo en el mundo de la acuariofilia, quieres comprar todos los peces de colores que ves, pero hay un límite para el número de peces que puede tener en un acuario, independientemente de lo grande que sea o lo eficiente que trabaje el filtro. Muchos peces crecen después de ser comprados, y algunos peces son territoriales y se vuelven agresivos cuando se agolpan con más peces. Siempre debes de tener menos peces en tu tanque en lugar de tener demasiados.
Limpieza excesiva
Cuando configures un acuario por primera vez, el equilibrio biológico es frágil e inestable. Evita fregar adornos, remover o aspirar la grava o limpiar el filtro cuando realmente no lo necesite, ya que esto puede destruir las bacterias beneficiosas y alterar su equilibrio.
Si tu acuario o filtro necesita limpieza en las primeras 2 a 3 semanas después de la instalación, es posible que el filtro sea demasiado pequeño para el trabajo que le pides, que tenga demasiados peces o que estés sobrealimentándolos y los deshechos sean excesivos.
Como prevenir el estrés en los peces
La mejor manera de prevenir o reducir el estrés de los peces es proporcionarles un ambiente saludable. Eso incluye abastecer el acuario con la cantidad correcta de decoraciones y tener los componentes (filtros, bombas, aireadores, etc) en perfecto funcionamiento. Hay que observar y asegurarse de que están recibiendo el cuidado correcto para minimizar los desencadenantes del estrés. Puedes prevenir el estrés en tus peces de la siguiente manera:
- Cambia el agua con frecuencia para mantener bajos los niveles de nitrato y amoníaco. Cada animal tiene un sistema inmune natural contra los patógenos. El transporte, el agua sucia o un gran volumen de patógenos por la mala condición del gua causan mucho estrés que tiene un efecto negativo en el sistema inmunitario. La piel mucosa, las branquias y las aletas, en particular, se vuelven más sensibles a enfermedades, como la mancha blanca, hongos y otros tipos de infecciones.
- El uso semanal de tratamientos protectores garantiza que los peces permanezcan bien protegidos de forma natural y que los peligros derivados de los patógenos se reduzcan considerablemente.
- Comprueba la temperatura del agua regularmente para prevenir variaciones estresantes.
- Proporciona un sistema de filtración óptimo que capture desechos y bacterias al tiempo que garantice una oxigenación adecuada.
- Facilita escondites, pero ten cuidado de no abarrotar el acuario, ya que puedes interferir con el flujo de oxígeno que es esencial para tus mascotas.
- Antes de añadir más peces, asegúrate de que sean compatibles con tus peces actuales para evitar el estrés del acoso o las peleas.
- Introduce los peces nuevos correctamente, es preferible sumergirlos en el acuario mientras aún están en su bolsa de plástico para ayudarlos a adaptarse a la temperatura del agua y para que tus peces actuales se acostumbren a sus nuevos compañeros.
- Si notas un comportamiento de acoso, retira el pez agresivo y colocalo en una pecera separado.
- Dale a tu pez el espacio adecuado, la regla general es que un pez de 2,50 cm de largo necesita casi 4 litros de agua.
- Aliméntalos regularmente con la proporción adecuada de comida y, si es posible, a la misma hora del día.
Al proporcionar un ambiente de acuario estable y saludable y al observar a los peces en busca de signos de cambios de comportamiento o alteraciones físicas, puedes reducir los riesgos de sufrir estrés y mantener un acuario saludable y sereno.